martes, 3 de octubre de 2023

La creación según San Juan

 La creación según San Juan



“De los pormenores y otros sucedidos de dominio público que acontecieron durante el primer encuentro de escritores, poetas, narradores y periodistas culturales de San Juan del Río”

 Tras un debut de alto nivel con la organización de la Semana de la Novela Policiaca el pasado mes de mayo, el autonombrado Colectivo Capa Roja, dio otro campanazo, esta vez durante tres días consecutivos, logrando conjuntar en el Foro San Juan y la Universidad Mesoamericana a un sinfín de creadores sanjuanenses cuyo común denominador es la escritura de objetivo comunicante, quienes aprovecharon la oportunidad para expresar públicamente ideas, trabajo, motivaciones y anhelos.   


Aunque de principio nadie lo percibió, en boca de organizadores, público, ponentes y autoridades, se cayó en la cuenta de que nunca se había dado un evento de esta naturaleza, en el que casi todos los invitados se conocían entre sí y a la obra de los que los acompañaban, pero no habían compartido un foro público, mucho menos a través de su voz, no la de sus creaciones, obras o escritos.

A decir de la cabeza visible del colectivo, Felipe Cabello, el proyecto original abarcaba más campos creativos, pero ante la dificultad de hacer confluir tanto talento en un mismo espacio y tiempo, no fue posible y así surge la siguiente calendarización:



El formato original era de mesas redondas en público, pero obviamente no se puede acotar nunca a quienes está concedida la creación y más si se trataba de expresar su porqué, así que algunos sabiamente se saltaron las trancas y terminaron casi todas las sesiones, de acuerdo con las circunstancias en un extraña mescolanza entre simposio, panel, foro, mesa redonda, conferencia y todos los formatos conocidos y hasta algunos nuevos, a veces varios al unísono, quedando en algunos momentos en amenas  plática entre cuates, no solo entre los de la mesa sino con el público y así surgieron abundantes comentarios de ida y vuelta y todo lo que la decencia y el mantener el tema central permitió.

Tan rico fue el contenido y la interacción entre los participantes que en todos los eventos, con tanto que decir, el descubrimiento de si mismos en esta circunstancia, el encuentro con almas gemelas y las pocas veces que en conjunto se han expresado respecto a su obra y las de los demás , se rebasó el tiempo señalado en una de esas raras simbiosis en las que los del frente no querían parar y el público no se iba o no dejaba de comentar, teniendo que intervenir los distintos moderadores para detener lo que ya era imposible de alargar más, aunque de verdad no tenían ganas de hacerlo. Dándose el caso que la directora municipal de Cultura, la Maestra Aleida Andrés, acostumbrada a acercarse uno 5 minutos antes de terminar cualquier evento para la entregar los reconocimientos oficiales de participación, esta vez, varias veces tuvo que ir y venir porque el asunto no acababa y el interés se mantenía, algunas veces mejor se sentaba otro rato para disfrutar de la plática.

Abrió la sesión la mesa de cine, con solo tres participantes, pero mucho que decir y aprovechando que la siguiente hora no había evento, marcaron desde ese momento la tónica de lo que serían las siguientes, así que duplicaron su hora, dieron un pilón…  y lo que les faltó. Todos expresaron sus motivaciones para crear cine, sus técnicas y el reforzamiento de mensaje. No son profetas en su tierra, pero al menos hacen las profecías, no bíblicas, si muy profanas del sentir de algunos sanjuanenses a través de lo que proyecta la pantalla, proyectada a la pantalla.  

La impresión del público se materializó desde entonces, por los comentarios vertidos, en que había mucho talento y pocos o ninguno- hasta ahora- los espacios para manifestarlo y el tiempo no sería suficiente tan siquiera para llegar a una postura común.   

Como en todo evento popular, y este lo era, había de todo, de chile, dulce y manteca al frente y en las gradas, público diverso, algunos convocados por la curiosidad, otros por la novedad, hubo quien solo quería conocer en persona al que solo sabían su nombre o su obra, en todos los casos se dio la participación del público, a veces tan amena como la de los ponentes dada la diversidad que lo componía.

En la siguiente participación, departieron algunos de los ganadores en diversas categorías de los juegos florales, ancestral evento de creación poética que forma parte de la tradicional feria de San Juan del Río. Todos sanjuanenses, que viven, piensan y crean en el municipio, además de expresar su sentir acerca de la poesía, y su motivación hacia la creación literaria, cautivaron al público sobre porque tuvieron el atino todos de leer en voz alta fragmentos de sus poemas de temática sanjuanense. Lugares comunes que todos conocemos, pero que descritos por quienes dan belleza a las palabras, pierden esa cotidianeidad y se convierten en validos referentes de la identidad municipal.

Al grado fue del gusto del público esa lectura de poemas que la parte final, destinada a preguntas del público, fue cambiada por la lectura de más fragmentos de las obras de los participantes. La magia de la poesía en su máxima expresión, no hay que explicarla, hay que sentirla. Y esta sesión, fue de mucho sentimiento.  Misión cumplida.



Para cerrar el día, correspondió la participación del Ateneo de Escritores, una organización local de creación y exposición literaria que vio sus mejores días al inicio de este siglo y sesionaron como supongo lo hacían cuando estaban en activo. Demostraron el músculo a través de un formato ya probado y que claramente se vio que dominaban, en el que hubo de todo, desde biografías de algunos de sus fundadores, listado de obras, lectura de fragmentos, acompañamiento musical y la magistral conducción de los moderadores, Elza Ríos y Felipe Muñoz. Contundente su uso del power point para ilustrar el trabajo de los integrantes en los tiempos ancestrales en que esa herramienta tecnológica ni existía.

Emotivo fue el rencuentro que incluyó reconocimiento a algunos de sus integrantes que en físico ya no están, pero se vio claramente que a través de su obra siguen vigentes en el recuerdo de cada uno de los integrantes de los que fueron maestros, referentes, amigos sobre todo y terminaron en compañeros en la interminable batalla literaria sanjuanense, en la que por lo expuesto siguen triunfando.    

  

El segundo día, jueves, las actividades iniciaron en la Universidad Mesoamericana, en ese su histórico patio porfiriano, tan agradable, que solitario al menos invita a la reflexión, ocupado por las ideas, aún más.   

En lo referente al Periodismo cultural en San Juan del Río, una vez pasada la catarsis inicial común en todas las sesiones, las temáticas fluyeron hacia detalles más técnicos del trabajo periodístico y quizá sin querer, pero más seguramente por el atino del moderador, se notó claramente la tendencia, no en balde el oficio de todos, hacia una entrevista en toda forma.

Por la tarde, de vuelta a la sede del foro San Juan apareció una numerosa  mesa de letras en San Juan (poesía, Música y narrativa) por alguna razón, en ella  confluyeron como publico muchos jóvenes, idealistas y revolucionarios como todos en la edad,  quienes en voz viva de quienes los antecedieron en esa actitud y hoy estaban al frente, pudieron contrastar sus sueños con la realidad de las dificultades  en alguna de las facetas de la producción literaria, sea respecto a la creación de la idea, el armado de la obra, la publicación y distribución de sus obras.


En el día final del evento, la primera de tres sesiones fue dedicada al teatro, otra vez con dos exponentes de alta gama  quienes dieron una semblanza de la bella arte a nivel general y respecto a la producción local y propia. No repetitivo, pero si común fue el recuento de dificultades con una variante, el gran talento en los exponentes en todas las categorías que surge y se va diluyendo por no tener alternativas para continuarlo.

Además de la expresión de sus anhelos y el recuento de experiencias hubo un reconocimiento como siempre, nunca exhaustivo para todos los que les antecedieron en la creación y puesta en escena teatral a nivel local.

La sesión intermedia correspondió a la mesa de revistas y fanzines, además de los enunciados en el cartel, se agregó Florentino Chávez Trejo, quien no pudo asistir por motivos de salud, pero habló en boca de su profeta, no Ezequiel sino José Manuel Velázquez, tan bueno el titular como el suplente. 

Fue una de las sesiones más variadas en el tiempo que reseñaron porque había creaciones de principios de los años setenta hasta la actualidad y transitó de diversos campos, desde lo más subterráneo del underground y la contracultura, hasta las páginas de sociales y los autores, desde estudiantes preparatorianos hasta editores de revistas de nivel profesional.

 

Sobresalió el recuento de las dificultades para la distribución de los fanzines, que por su misma naturaleza no son producto al alcance de todos, pero sufren igual destino de las revistas de impresión y diseños, estas por su costo a veces no son del alcance de quienes desean editarlas.

No previstos, pero gracias a la interacción de los asistentes, surgieron temas pendientes en el imaginario de los creativos locales, batallas del pasado que casi nadie recordaba a no ser por sus protagonistas: la desaparecida por decreto prepa San Juan, los primeros conciertos de rock y la represión a las organizaciones que los auspiciaban: los viejos periódicos, la creación seria y la ocurrencia, todos tan valiosos y para todos hubo espacio, como siempre, solo faltó tiempo.

Y llegó la sesión final, ya casi sin tiempo, rebasado completamente casi dos horas por las anteriores, se dio el cierre con la mesa de Historia “otras voces” igual, conocidos entre sí pero que nunca habían estado juntos. Había al frente algunos investigadores de alto nivel y otros como el que esto escribe que rehúye a serlo. Quienes, en el poco tiempo destinado y con el moderador, el Lic. Felipe Muñoz Gutiérrez, haciendo requiebros para condensar el tiempo, dieron un panorama general de su labor, no hubo tiempo para más, incluso ni preguntas, solo un comentario general del público. Otra vez, con un cruce generacional, desde los ochenta del siglo pasado hasta la actualidad, todo es Historia y además de escudriñar la local, todos han sido docentes alguna vez, en mi caso, tenía al lado dos maestros míos de tiempos pasados.

Otro de los muchos comunes fue el agradecimiento a Felipe Cabello, sobreviviente ya de varias luchas en el ámbito cultural, tanto a nivel oficial como de manera independiente y a pesar de ser de los más jóvenes, por su carácter multifacético no dudo en intervenir tanto como participante como moderador y hasta como staff en las diversas mesas, sin descuidar un ápice su papel de organizador y como intermediario con la directora de Cultura, con grande participación como facilitadora del evento.  


Difícil narrar abarcando todo lo que se habló al menos en una de las mesas, este tipo de eventos son para escucharse, no para leerse, la presente reseña no puede dar contenido de todo lo que surgió, modestamente está redactada con la única intención de tratar de incitar a la asistencia a eventos similares y si se da un seguimiento a la narrada y se generan otros similares, mejor. Aquí solo está la impresión general personal de un servidor, y la crónica completa y el recuento de los contenidos estuvo a cargo de otros, si las consigo, se las daré a conocer. 




Todas las fotografías son personales, excepto los carteles que son del Colectivo.