martes, 22 de diciembre de 2020

Arturo


Arturo


Arropado siempre al costado de uno de los puestos de periódicos de la avenida Juárez, casi en la esquina con Hidalgo, camuflajeado tras las ruidosas notas de todo tipo de rock emanadas de una vieja grabadora, desde hace mucho tiempo se instala uno de esos personajes de la ciudad, tanto que parece que siempre ha estado ahí, formando parte del mobiliario urbano.


Fotografía personal: Arturo

 Todos los días, aunque no siempre, despliega, como alfombra mágica, sobre una mesa, toda clase de artilugios entre utilitarios, de adorno, simple bricolaje o completamente de culto para las diversas tribus urbanas que acuden con él.

Por el pelo largo, siempre se le ha conocido como el HIPPIE, aunque dice que nel, que jamás adoptó la filosofía de ellos, más bien sería una persona como todos y en cuanto a lo que realiza, se considera un artesano urbano.


Fotografía personal

 Chilango él, llegó a San Juan en un rebote del destino: resulta que una de sus abuelas era del barrio de San Isidro y así, en un momento de cuyos datos no quiere acordarse, pero por los que hubo necesidad de migrar, en 1985 retornó a la tierra de sus antepasados y entre tanto ya está rondando los 35 años de estar en el lugar donde todos lo conocemos.

El gusto por el rock y los ritmos urbanos le vienen de sus tíos y otros familiares, quienes desde los 8 años le inculcaron allá en la vieja demarcación de Iztacalco, quizá involuntariamente el gusto por la música y la lectura del tema, que todavía practica. Así pudo conocer y disfrutar de los grupos y solistas que en ese tiempo completaban la breve  escena capitalina: Life, Vago, Árbol, Three Souls, los Dug dugs, Paco Gruexxo, Javier Bátiz y muchos más, algunos efímeros.

 Normalmente se le puede ver en un estado que parecería de letargo, casi sin movimiento y que cuando lo hace, solo es de la cintura para arriba, casi al mismo ritmo que las difusas notas de la grabadora que ameniza su actividad comercial y parece ser mayor que él. Sin embargo, bajo la aparente calma, bulle un estuche de actividades, ya que conoce a todos sus clientes y en cuanto llega alguno la conversación se hace fácil, pocos son los que únicamente van por la compra, todos recurren al bonus pack que siempre ofrece, aunque no haya venta: la conversación, en algunos casos completamente trivial, en otras llega a niveles profundos, de manera que incluso pudiera parecer un sacerdote confesando a su grey, y es que no falta el cliente alicaído, que necesita desahogar sus penas y recurre a él. Otras veces el punto de conversación  lo da la ancestral práctica del regate, que acepta con gusto, a la usanza de los viejos comerciantes que por siglos se han establecido o pululado en esa zona, a veces es mejor perder unos centavos que un cliente.


Fotografía personal

No descuidando sus  orígenes y para hacer cierto aquello de que es artesano, de vez en cuando saca los alicates clásicos del gremio, ahora sí que de los hippies new age y se le ve componiendo o emperifollando alguna cadena, una gargantilla y todo aquello que el alambre galvanizado une, haciendo aparecer las tradicionales artesanías citadinas. Otras veces solo da sentido y soporte a alguna piedra bonita que estaba escondida entre alguna playera, los muchos emblemas metálicos de grupos o al colmillo de algún animal desconocido, que él dirá que es de alguna fiera, quién sabe, aunque ya engarzado es otra cosa.

Especializado, aunque no enclaustrado en el rock urbano, conoce a todos los exponentes, nacionales y foráneos del género, a los permanentes, a los efímeros, de los primeros, con muchos ha convido hasta de manera interpersonal  ya que además, ha tenido su faceta de empresario. Es común ver en las esquinas de la ciudad los clásicos carteles con la leyenda “Producciones el Hippie presenta…” Aunque dice que más que actividad empresarial es de promoción del género.  


Fotografía de Arturo Sierra 

Otra vez, de fondo, resuena la grabadora, la mala calidad se incrementa conforme te acercas o será lo viejo de la grabación del rock macizo en turno que emana de ella a tal grado que, si cierras los ojos, fácilmente te sentirás al interior de uno de aquellos hoyos funky donde sobrevivió el rock nacional gran parte de los años setentas y ochentas y que precisamente estaban en su apogeo cuando salió del defe. Tiene la extraña cualidad de que es difícil acercarte a él y que no te adivine o halle entre la enorme discoteca (ahora sí bien dicho) algo de tu gusto musical, a veces a la primera, si no es así, no importa, en cientos de discos, hallarás algo.

Sus clientes, algunos de décadas, son de todas partes pero predominan de lugares tradicionalmente rockeros  desde su creación como las antes lejanas y ahora absorbidas por la mancha urbana, las ancestrales colonias Juárez, Fátima, el Riel y otras surgidas recientemente a los extremos como la Peña y el Sagrado Corazón y no es difícil ver a gente de poblaciones y municipios aledaños.

Expende de manera general música, no se encasilla en el Rock, incluso, dice que muchos de los clientes son tradicionales del género y toda la vida consumen lo mismo, conforme va evolucionando a nuevos exponentes, otros conservan el gusto por los mismos grupos y ritmos sin cambiar, algunos, incluso buscan música más calmada. Ha notado que, aunque algunos géneros trascienden las edades, se pueden dar combinaciones entre las de la clientela, que van desde adolescentes hasta algunos más maduros.

Así, ofrece poner en tus manos una historia musical de más de sesenta años ya, desde los inicios de los diversos ritmos que en conjunto se transformaron paulatinamente en la cultura y la lírica de la juventud desde entonces, con todas sus variantes y consecuencias. Aunque a decir suyo, el rock persiste por la música, no por sus ideales, que por la misma naturaleza de los exponentes y los receptores siempre es cambiante, aunque se mantienen cosas.

Algunas noches, sobre todo en sábado, el sonido grave de las notas que emanan del puesto te hacen voltear y suponer que ya revivió la grabadora, pero no, en esos episodios el ambiente se hace estridente y realmente vívido. Ocurre que en tales días presenta un concepto de rock de acera o de banqueta en las que una banda interpreta algunas canciones en, haciendo uso precisamente de lo ancho de la de esa sección de la principal avenida del centro.


Fotografía personal

Desde su llegada a la ciudad, se hizo conocedor del breve confabulario de los grupos queretanos del género, no se diga de los casi eternos Six Beer, la Maldita Profecía y los Limones Punk.  

Contra lo que pudiera pensarse, en los conciertos que organiza dice no haber tenido problemas con la tramitología, será porque tiene una organización eficiente  y aunque por los precios accesibles tampoco hay un aliciente monetario termina haciéndolo por gusto -vivo de la banda  y estos conciertos son un aliciente a una convivencia ya que no se puede dejar abandonada a la juventud sin vías de escape. A mí me toca el rock, lo otro es asunto de cada quien, afirma respecto a la relación entre el rock y las drogas que dice existe, pero se ha exagerado.  Él siempre ha tratado de concientizar al respecto con diversos resultados, pero por sí las dudas en los conciertos que organiza, personalmente se encarga de cuidar el orden, ha sido así en los locales locales: la croq, el salón de Orozco, la nave Ganadera el anexo al Cecuco, el mismísimo Cecuco, incluso antros como el Vitros.

Fotografía personal

Su labor abunda, es apoyar al rock, en la venta, la difusión de conciertos, aunque no sean de él, como gritos de libertad, y a todos va, aunque no sean de él, pues dice gustarle toda la música, menos las rancheronas, esas sí no son de él.

Su nombre es Arturo Sierra Castillo, aquel chavo banda capitalino. (que sí lo fue pero solo esquinero, no llegó a formar parte de las legendarias  bandas en boga de entonces, los Panchitos y los BUK, célebres hasta en televisión y cine) 

A su gente, solo pide que apoyen más al rock, que sean unidos. Los conciertos se hacen con mucho esfuerzo, que valoren las tocadas, son pocos y acudan a lo que haya aunque no les guste tanto, hay que abrir y mantener espacios, de por sí, siempre ha habido prejuicios hacia la música.


Fotografía de Arturo Sierra 

Termina la plática, regresa al lado de su puesto, le da algunos ajustes a la grabadora que suena de nuevo, él como siempre, tararea en voz baja, se las sabe todas. A veces se pasa a la banca de hierro colado que alguna vez fue verde frente a su puesto o en la otra orilla de la jardinera que ocupa, en la llamada esquina del Rock, seguramente planeando el siguiente toquín.

El presente trabajo refiere únicamente a la semblanza de Arturo, marchante mío de música de muchos años, no pretende ser un recuento de la escena rockera sanjuanense, creo que los camisas negras tienen sus propios cronistas que lo harán mejor que yo,

Si quieres saber más del tema o de él, tiene su propia página de Facebook

 https://www.facebook.com/ArturoElHippie/

De la casi infinita cantidad de fotografías que tiene, supongo que más que los cds, tanto en su página como en físico, presento algunas que me facilitó. No subtitulo todas por no omitir algún nombre, tanto de los exponentes, de él y de la banda pero principalmente porque no conozco a todos, Solo referiré a dos históricos recientemente fallecidos.

(todas las imágenes siguientes son de la colección personal de Arturo Sierra Castillo)


 El muñeco de los Tex Tex


 Con Charly Montana



 








:________________________________________________________________________________

De Pilón

No vaya siendo.

Como hilo conductor de esta historia, tomé la grabadora de Arturo, para los que no las conocieron, el término se acuño en los años setenta y ochenta para los aparatos portátiles que reproducían grabaciones en cinta, (cassettes) el soporte estándar de entonces. Por la opción de funcionar además con pilas alcalinas, eran muy populares para llevar fuera de casa, ya que todas tenían un asa plegable. 

Oficialmente eran radiograbadora, porque la mayoría captaban señal de radio y podías grabar lo que quisieras. Hubo de todos modelos, diseños y tamaños, algunas muy locochonas, desde las de bolsillo que solo se veían en las películas de espías hasta enormes. De la calidad de sonido, todas eran malas. Con los años introdujeron variantes, principalmente con bocinas laterales desprendibles, sonido estéreo, doble casetera y en tamaños, pero la más popular fue siempre la de panal de Sanyo 3500, que tenía en lugar del asa rígida, un cincho textil de manera que podía cargarse al hombro, Se le decía de panal por la forma de celda de los orificios de la bocina, que estaban en ambos lados, pero solo una bocina, lo del sonido dynamic que decía en su frente, era a una vil mentira, también al parecer de adorno tenían un twitter, la verdad es que se oía mal, pero se disimulaba con lo raro que era el sonido saliendo por dos partes. Había dos modelos, plata con negro o negra toda, ambas bastante feas, pero fueron las que rifaban.

 

 

 EL CHICHIMECA AL SERVICIO DE LA COMUNIDAD

AVISOS DE OCASIÓN

________________________________________________________________

 De la escasa escena de narradores de la historia sanjuanense, aparece, -es un decir, ya tiene tiempo cronicando- en un nuevo formato de difusión, Felipe Cabello, esta vez  por culpa de la Revolución mexicana.

 Comparto el enlace al canal de Youtube.

 https://www.youtube.com/watch?v=Oj4m_ue_qdk&t=41s

Video realizado en colaboración con Arturo Montes.

________________________________________________________________

Como un esfuerzo más de difusión de las letras sanjuanenses, frenado por  las condiciones actuales, porque ya estaba en digital desde hace meses, aparece impreso un número de la revista Entrever, de la Universidad Autónoma de Querétaro, dedicada mayormente a las memorias de Salvador Barrera, narrador de San Juan del Río durante décadas, muy copiado, poco reconocido. No dejen de verla y leerla en el siguiente enlace.

 Entrever 9

Editor Fundador: Dr. Julio César Schara

Director CIM- UAQ: Dr. Juan José Lara Ovando

Editores Responsables. L.C.C. Felipe Cabello Zuñiga, Mtro. Pablo Antonio Junco Villafuerte.

Si tienen algún interés en conocer las actividades del CENTRO DE INVESTIGACIONES  MULTIDISCIPLINARAS DE LA UAQ, Campus San Juan, pueden acceder a su página de Facebook.

https://www.facebook.com/IIMArteyCienciaUAQ/ 

________________________________________________________________

Y ya encarrerados, al menos en digital ya está en el ciberespacio otro número de la misma revista, con contenido variado, no hago recuento completo del contenido, porque está muy bien descrito en su página editorial. Participan diversos temas y géneros, con algunos de los nuevos y otros no tanto escritores sanjuanenses y foráneos. Les recomiendo el primer artículo.

 ENTREVER 10




miércoles, 18 de noviembre de 2020

La torre de vigilancia

 

Retomo actividades tras breve receso por asuntos profesionales.

En entradas pasadas, he dado cuenta de algunos elementos arquitectónicos presentes en la ciudad, cuyo sentido no se explica en la actualidad sino al conocer su historia antigua, se les llama testigos del tiempo.

La avenida Juárez, testigo mayor del tiempo.

El más visible que por cotidiano nunca notamos está en el centro histórico, en la que es su principal arteria, la avenida Juárez. Nadie se explica porque tiene curvas si se supone que fue de las primeras que se trazaron, es decir había espacio suficiente para hacerla recta y sin embargo tiene cambios extraños de dirección.

 Aunque algunos suponen alegremente que es así porque el Camino  Real se trazó sobre un antiguo arroyo, la realidad es parecida, pero no exactamente. No se puede construir un camino sobre un arroyo, porque cada vez que el agua bajara por él lo destruiría o al menos dejaría inutilizable por un tiempo. La solución fue sencilla, en lugar de ir por los arroyos, se decidió hacerlo a su lado.  

 


Imagen modificada personal, de un calendario comercial
La línea gris es el trazo del antiguo camino Real desde su entrada a la zona urbana (A) hasta su salida en el puente de la historia (B)
Las líneas azules son los posibles trayectos rectos que no se tomaron por los accidentes orográficos.
Desde la carretera a Tequisquiapan (ab)
Desde la curva (CB)
Desde la cárcel (DB)


Después de la indeterminada fecha de creación del centro del pueblo, pero que con seguridad ya estaba en la década de 1550 y que el trazo definitivo de dicha avenida, como parte del camino Real fue en la década de 1580, la población era mínima y de haber querido hacerlo recto, lo más que se hubiera afectado eran algunas milpas, no había impedimento legal y sí la obligación de las autoridades de garantizar el paso libre y espacio para comerciantes y proveedores dentro de un pueblo de indios .

Puestos ante el panorama de llegar a la parte más vadeable del río, que es la zona del actual Puente de la Historia, los constructores optaron por atravesar los arroyos en alguna parte plana y seguir el camino a un costado, cuando ese arroyo se acercaba al río, se pasaba a otro, se cruzaba e igual se seguía a un costado y así sucesivamente, la ventaja es que eran temporaleros y poco profundos por lo que se podían atravesar fácilmente y por ser solo unos metros sobre ellos el paso, era relativamente sencillo nivelar esa parte.

Localmente el camino iniciaba en una garita ubicada a mitad del actual Boulevard Juárez, entonces una especie de barranca no muy profunda, seguramente se rellenó solo en las partes más necesarias. Al llegar lo que hoy es “la Curva”, había un arroyo que ya casi no se nota por arreglos modernos, sobre todo el peralte de la vieja carretera panamericana, arroyo que iba hacia Mariano Jiménez y Reforma, se libró simplemente haciendo el camino a su lado.

 Después aparecían otros dos, uno esencialmente la hoy calle de Allende y otro que bajaba por Galeana, ambos superados pasando igualmente el camino a un lado de ellos, al llegar cerca de la antigua Presidencia Municipal, que era donde terminaba la meseta del centro, había otro que iba a desembocar al río cerca de San Luis Montañez (antigua Manzanares) que también se cruzó y bordeó. Es la razón de las curvas antes y después de la cuadra donde está dicho edificio, si se hubiera seguido recto se llegaba al río, pero en un lugar no vadeable.


Fotografía personal, Avenida Juárez, una de las inexplicables curvas.


Muchos de esos arroyos aún existen, no con la corriente ni pendiente de antes, por rellenos y nivelaciones a las calles. Se pueden observar siguiendo la ruta del agua durante las lluvias. Contrario a otras calles de la ciudad, esas sí trazadas sobre los arroyos o encauzándolos para permitir el paso del agua enmedio, en el camino Real se pasaron de lado, ya que, aunque ninguno era caudaloso, los escombros dejados por la lluvia podían impedir el paso a las carretas, así que, atraviesa varios, pero el agua no corría sobre él sino a un lado, por los cauces naturales, muchos ya obstruidos.

Casi al final de la actual avenida desembocaban al río dos últimos arroyos, uno cerca de las actuales calles del Pasoancho y callejón del Olvido y otro que iba a dar cerca del hoy puente de la Historia, es la razón de la última curva, cerca de Jesusito. Ambos tuvieron el tratamiento descrito.

Y dentro de la Avenida como testigo, hay otro: 

La torre de vigilancia

También ya he mencionado que la cárcel local se ubicó por casi cuatrocientos años en el mismo lugar, el edificio, con muchas modificaciones, aún se encuentra en pie. En plena avenida Juárez.

Fue edificado, según menciona Ayala, en un terreno perteneciente a la República de Indios y cercano al camino Real, detrás de él, en un inicio se encontraba un terreno en desnivel sin utilidad por ser parte de las Peñitas, hoy ocultas bajo las construcciones, pero aún se percibe que hay algo ya que el nivel del suelo al sur de la manzana esta casi seis metros debajo del de la avenida.

 Tiene una historia curiosa esta cárcel, porque las primeras referencias de ella, que serían de finales del siglo XVI y principios del XVII, la describen como una especie de corral circundado con tablas, que no debieron ser muy altas o muy cerradas porque, no existiendo aún para la mayoritaria población indígena el concepto de cárcel como lugar de reclusión sino donde esperaban a que se les diera sentencia, frecuentemente la abandonaban para ir a hacer cosas importantes, el colmo está en un documento de un proceso seguido a un indígena sanjuanense en Querétaro por esos años, atrapado en un delito, cuando se le preguntó dónde vivía, contestó que en… la cárcel de San Juan del Río, otros decían que se salían porque tenían que trabajar y otros motivos similares. Así que cárcel, cárcel, no era.



Imagen tomada de Google 2020. la manzana de la cárcel.
lo delimitado en amarillo es el área probable de las casas consistoriales o de administración virreinal, dentro de ellas, en rojo, el edificio de la cárcel. En blanco, la parte trasera, antes zona de peñas en descenso, seis metros por debajo. Las delimitaciones las marcan los tipos de bardas.


Para los siglos siguientes, cambiado el sistema de justicia, la cárcel, ocupando el mismo predio se construyó de cal y canto, las instalaciones de administración debieron ocupar toda la cuadra (excepto la línea de casas que están en Reforma, que son más recientes. Observando la barda trasera, se puede documentar que era muy alta y llegaba hasta la zona donde hoy es el hotel y el negocio de telas. Posteriormente esa parte pasó a manos particulares como casas y en la esquina con allende un mesón de los muchos que tuvo el pueblo.


Fotografía personal, fachada de la vieja cárcel cuando era Centro histórico y Cultural.

Por la parte de atrás de la cárcel, como ya mencioné casi a la mitad de la manzana, el nivel descendía hasta donde de inicio era parte de la Plazuela de los Trabajos, pero no había construcciones mayores por estar las peñas de cantera a flor de suelo.

A pesar de tener ya una construcción sólida, la cárcel generalmente se encontraba en estado lamentable, son innumerables las veces que fue reparada y rediseñada por frecuentemente derrumbarse paredes, deteriorarse otra y, por el método constructivo, piedras unidas con lodo, la continua horadación de los internos para hacer boquetes por donde escapar, unas veces por el frente, pero más frecuentemente por atrás.

 


Imagen de Google 2020 esquina con Reforma, en lo alto se ve la barda de la cárcel, la franja de casas en esa calle son de época posterior.


Parece que, a partir de la desaparición de la República de Indios, que la mitad sur de la manzana pasa a particulares y al menos se le ponen bardas, insisto en que no era terreno de cultivo y empiezan a edificarse algunas casas. Es la actual acera norte de la Plazuela Guadalupe Victoria. De esa manera se circunda por fin la manzana, del lado de la avenida, completamente edificada, por el lado sur, completamente bardeada.

No sé si era el destino de la cárcel ser porosa o el carácter indómito de los habitantes que los instaba a la fuga, creo que la mala construcción era lo que losa incitaba porque en la época independiente sigue habiendo reportes constantes de fugas, incluso los extranjeros lo hacían.

A mediados del siglo XIX un viajero anglosajón, quedó en el centro del país durante la guerra del 47, las autoridades los detuvieron y trasladaron a la ciudad de México. Como no iba preso lo hospedaron en Jesusito, al principio lo trataron bien porque arguyó que no era norteamericano y sí católico, incluso era invitado a las fiestas de la sociedad sanjuanenses, hasta que se le descubrieron dos delitos, era norteamericano y protestante y fue a dar con todos sus huesos ... ahora sí a la cárcel y como no podía ser menos que los nacionales, se fugó, brincando la barda trasera, lo más extraño es que sin recursos ni posibilidad de ir a otro lado, regresó y se entregó de nuevo.

Para el siglo XIX, la cárcel, entre derrumbes y horadaciones intencionales, seguía siendo objeto de constantes fugas, Salvador Barrera en sus Testimonios menciona una de tiempos de Villa, cuando  ocupada la ciudad por sus tropas, a las autoridades locales, se les ocurrió presentarse ante los jefes villistas  con el resultado de que fueron mandados a la cárcel para ser fusilados. Se salvaron gracias a la fragilidad del lugar que ellos bien conocían y por la parte trasera, saltaron la barda y escaparon por la Plazuela, donde incluso ya les tenían prevenidos unos caballos y pudieron huir.

Solo mencionaré que las reparaciones y deterioro del edificio continuaron, son constantes las solicitudes de apoyo del gobierno municipal al estatal con tal fin. Para la década de 1950  existió en la ciudad un personaje del solo he hallado algunos datos, pero al parecer era muy conocido y popular, supongo que no era un criminal peligroso, pero sí travieso, el caso es que constantemente caía a la cárcel y constantemente se fugaba, incluso en los reportes de la policía ni se menciona su nombre, solamente su apodo: “el chapulín”, que parece ser le venía por su facilidad para saltar las bardas, esencialmente las de la cárcel. La última ocasión en que se le menciona, en la década descrita, junto con otros presos  volvió a escapar, ya habiendo más casas en la parte trasera de la manzana, tomaron las azoteas a los lados, bajando en la esquina, en el patio del Mesón de San Pablo, donde había un velador que estaba dormido y despertado por los ruidos le dijeron que acababan de entrar al baño y salieron por el amplio portón hacia la avenida Juárez.

Otro de los motivos por los que esta fuga fue lateral es que ya existía el que hoy es otro de nuestros testigos del tiempo: la torre de vigilancia.


Fotografía personal,  interior de la cárcel, la torre, en el límite trasero original.


Producto de tantas fugas, sin tener fecha determinada, las autoridades decidieron colocar lo que se conoce como la torre de vigilancia, que en realidad es una atalaya o parapeto, con solo dos orificios lineales para sacar los rifles, se encuentra al fondo del edificio original, aunque detrás siempre hubo una zona de amortiguamiento, no ocupada, hasta el siglo XX, cuando en la última reconstrucción se amplió el edificio hacia esa parte, se ocupó como biblioteca municipal. Se supone que ahí había un vigilante permanente para, en caso de fuga, disparar hacia el baldío que por estar metros abajo, facilitaba el accionar de las armas. Hoy, en caso de hacer algún disparo desde ahí, chocaría con una pared, pero Considérese el hecho de que hoy lo que era la parte peñascosa está ocupada por casas y así cobra sentido este testigo.



Fotografía personal, desde lo alto, la torre de vigilancia.
 

Su material es muy rústico y es muy pequeña. Supongo que no cualquiera aguantaba ahí en tan incómoda posición el lapso de guardia, lo que aumentaba las posibilidades de huir.

El lugar dejó de ser Cárcel municipal a finales de la década de 1960, se remozó y amplio de alguna manera, dándosele uso cultural, se conoció como Centro Histórico y Cultural  y todos los espacios se dedicaron a actividades culturales a nivel municipal; Un pequeño museo, una biblioteca, salones de clases, salas de exhibición, oficinas.



Fotografía personal,  del antiguo patio de la cárcel

 Hace unos 5 años, el  lugar fue desocupado, falto de mantenimiento como siempre, se deteriora a paso acelerado, no parece haber interés por arreglarlo, o parece ser el interés que no se arregle, no sería de extrañar que algún día aparezca en su lugar una plaza comercial o un set de aparatos de ejercicio. Su sistema constructivo mayoritariamente de piedra y lodo que no ha cambiado en siglos no ayuda mucho, sin mantenimiento poco a poco cae por su propio peso, pero si durante cuatro siglos se pudo mantener, ¿por qué ahora no?


Si deseas conocer otros testigos del tiempo, da clic en el siguiente enlace

Testigos del tiempo


Para temas relacionados con esta entrada, clic en estos. 

Los viejos edificios públicos

El tragadero de San Juan

El tragadero en gráficas

Camino real de San Juan

__________________________________________________________

EL CHICHIMECA AL SERVICIO DE LA COMUNIDAD    ______________________________________________________________

Un saludo a la maestra Marimar Santana, antigua encargada del Archivo histórico Municipal, quien fue, en su oficina, ubicada en el mismo edificio, vecina de la torre de vigilancia y quién me informó qué cosa era eso que ya había visto, nunca había sabido qué era.

La historia del americano la encontré en un libro en inglés, donde él mismo narra su aventura, dedicando muchas páginas a su estancia en San Juan del Río, creo que merece una entrada aparte, prometo escribirla pronto.

 

 

martes, 18 de agosto de 2020

El bobo del semáforo (Edición de aniversario)

 El bobo del semáforo (Edición de aniversario)

 

Esta es una de esas cosas que ocurren o acontecieron en tiempos pasados aquí en San Juan del Río, sobre todo a mí y que cuando las platico, nadie me cree, pero  como hay que consignarlas, a veces no tengo más remedio que escribirlas, a ver qué les parece:

Hace algunos años, tantos que ya casi nadie lo recuerda, aunque la mayoría de los que lo vivimos aún andamos por aquí, el tramo de la avenida Juárez, entre “la Curva” e Hidalgo, era de dos sentidos, es más, toda la avenida lo era, poco tiempo hacía que había dejado de ser parte de la Carretera Panamericana y el tráfico que por muchos años había sido intenso, se había reducido al mínimo, lo cual era aprovechado para desarrollar altas velocidades por los escasos conductores locales y alguno que otro despistado que bajado de la autopista creía que la antigua carretera que atravesaba la población aún existía y tenía preferencia.

No tanto por el tráfico, sino por las altas velocidades, el gobierno, siempre previsor, decidió que esta, la principal calle de la ciudad tenía necesidad de entrarle a la modernidad y que mejor símbolo de ello, que instalarle un semáforo. Y ni tardos ni perezosos colocaron uno en el extraño cruce de la ciudad, es decir casi en la esquina con Guerrero, extraño porque no es esquina en ningún lado, pero era muy usado entonces y hasta hoy. Lo novedoso consistía en que fue el primer semáforo que hubo en la ciudad.

Fue notoria la rapidez con que se procedió, ser supone que por ser uno que ya se tenía prefabricado, muy simple a comparación con los actuales, un tubo curveado para que las luces que formaban parte del mismo cuerpo quedaran horizontales. En el gusto que se tenía en la ciudad por la posibilidad de acceder a tal modernismo, nadie hizo caso cuando se dijo que era un semáforo preventivo.

Precisamente por ser preventivo, es decir que no tenía los tres colores, solo amarillo y parpadeante para poder llamar la atención de quienes en sus autos transitaban por nuestra avenida de oriente a poniente y se fueran acostumbrando a que había que bajarle a la velocidad, la sorpresa fue para los que no pusieron atención en que solo era preventivo y esperaban ver los tres colores como un galardón más de la ya para entonces como seis veces heróica avenida Juárez, que había sido en retrospectiva: Carretera Panamericana, Camino a Querétaro,  Carretera Nacional y Camino Real. A nivel local, específicamente, el nombre oficial de la avenida completa era Gran Avenida Juárez, pero también se le nombraba por tramos: donde se instaló el semáforo era la confluencia entre los llamados Calle del Diezmo y Calle del Sacromonte.  

 Existen en los archivos de don Gustavo Nieto, que era el presidente municipal en aquel entonces, algunas fotografías que documentan la inauguración del semáforo, la primera que vi la encontré de casualidad hace pocos años en su página de Facebook, me llamó la atención porque algo recordaba de ese semáforo, aunque no lo tenía muy claro.

Teniendo como fondo la reja del atrio del Santuario del Sacromonte, se ven algunos adultos, entre ellos el Presidente y un grupo de estudiantes, según deduje, de la cercana escuela, que habían sido llamados para dar realce (no es cierto, se les llamaba para hacer bola) la fotografía es poco clara, pero da constancia de la expectación que causó, incluso, uno de los estudiantes se observa con la boca abierta y la mirada hacia arriba, seguramente al momento preciso de ver encendido por primera vez el artilugio. Incluso comente a alguien que cómo estaríamos de inocentes en aquellos tiempos, que a ese  niño ante lo que veía hasta la baba se le caía.  



Fotografía de la página de Gustavo Nieto, quien aparece a la derecha del poste y a la izquierda... un bobo

 Pasado algún tiempo, aparecieron más imágenes, también de don Gustavo, esta vez más claras, del mismo evento que por cierto fue muy corto y consistió básicamente en el encendido, unas palabras a viva voz, los consiguientes aplausos, algunas fotografías y listo, cada quien para su casa. Pasarían algunos años más para que en el siguiente crucero de la misma Avenida, es decir en su esquina con Hidalgo se instalara el primer semáforo realmente funcional y otros más para que apareciera otro, único en el mundo que, en lugar del color verde, tuviera … azul y otro que resultó carísimo y motivo de un pleito que lo dejó ahí inservible, pero esa ya es otra historia.


Imagen tomada de Google Street View 2020  El sitio del primer semáforo de la ciudad.

 La verdad, con la primera fotografía no recordaba nada claro, pero en las nuevas gráficas tuve la posibilidad de ahora sí, ver que en los asistentes había algunos conocidos y en ese momento  todo volvió a mi memoria.

 

Fotografía de la página de Gustavo Nieto. Otra vez el niño junto al poste, bobeando a otro lado.

El evento se realizó en el año 1977, cuando yo cursaba  el sexto grado en la cercana escuela primaria Mártir de Chihuahua y seguramente por esa cercanía, al presidente se le ocurrió ir con la directora, que era la maestra Catalina Barrón para que le prestara unos alumnos, fue cubierto por la escasa prensa local, pero hubo también periodistas de Querétaro.

Así, con las nuevas y más claras imágenes pude reconocer a algunos de mis compañeros de escuela y amigos de años: Leonardo García Santiago y Mario Becerril Pineda, de la Cuesta; Pedro Juan Sedano Bautista de Francisco Villa, Enrique Corona Yáñez, del callejón de Pino y …  el bobo que anteriormente había visto, solo que ahora por la mejor calidad de la fotografía y el regreso de mis recuerdos ya fue completamente reconocible, portaba ese día como su uniforme, una playera polo blanca con una calcomanía de caballito a la derecha, el cierre del pantalón bajado y otros indicios que lo caracterizaban entonces, porque resulta que uno de los grupos que ese día salieron de la escuela fue el mío.

Entre las imágenes, aparece también mi maestro, Agustín Ugalde Martínez, que en esos tiempos era muy parecido físicamente a don Gustavo y si no mal recuerdo, de edades similares, igual que la maestra Cata, por lo que supongo eran conocidos.

El bobo del semáforo, no  crean que se me pasó, ahora anda escribiendo en blogs.

  _________________________________________________________

 Ah, el aniversario es mío


Imagen tomada de Google Street View 2020  En el sitio donde la banqueta disminuye, la huella del primer semáforo y dos posteriores.


Imagen tomada de Google Street View 2020. Unos metros adelante, el semáforo actual. Si el anterior no daba como crucero, este menos, ni siquiera da con ninguna esquina, pero es uno de los más concurridos de la Ciudad,

Fotografía de la página de Gustavo Nieto. Gustavo Nieto y Catalina Barrón. mi maestra de 1° y 5° en la Mártir de Chihuahua, de la misma época del semáforo.

lunes, 17 de agosto de 2020

El tren Bala que resultó Balin en San Juan del Río

 EL TREN BALA QUE RESULTÓ BALÍN

 

Antecedentes

Aunque usted no lo crea, el antecedente más remoto para esta entrada se remonta al año de 1964.

Como se recuerda, al terminar la segunda guerra mundial, Japón como el último país del eje en rendirse fue obligado a ello a punta de  bombazos atómicos, motivando que esa rendición fuera de manera pública por parte del emperador incluyendo declarar ante su pueblo, que no era un Dios, como hasta ese momento suponía su gente.

No podía haber sido más sombrío el futuro de ese país, por los estragos, muertos y la obligación de  pagar la indemnización por la guerra, incluidas varias de sus industrias, lo que supondría un empobrecimiento general.

Pero resulta que en realidad les tomó apenas unos años resurgir de sus cenizas como un país completamente modernizado y adelantos ni siquiera pensados en otros países supuestamente en mejores condiciones, a tal grado que obtuvo incluso la realización de los juegos olímpicos de 1964., lo que hizo voltear los ojos del mundo a ese país, que por los antecedentes se suponía todavía hundido en el tiempo, en una organización feudal.


Fotografía Tomada de Japonismo.com. 1964  El Tren Bala Original en su inauguración.

Las imágenes que de él llegaron, por primera vez a través de la incipiente televisión, fueron diametralmente opuestas: de la etapa de reconstrucción había pasado a una transformación completa. Especialmente llamativo fue observar su moderno sistema de transporte ferroviario que parecía de otro mundo en comparación con lo que se tenía en México. Ignoro si en otros países también, pero al menos aquí, se le bautizó como el Tren Bala, supongo que por su velocidad (200 km/h) y su forma.

Tal fue el impacto de conocerlo y verlo en funcionamiento que incluso para países desarrollados, quedó como punto de referencia o meta a alcanzar para su sistema de transporte público.  México, con un sistema ferroviario que por esas fechas concentraba gran parte del transporte de personas y carga del país, había ido solamente preocupándose por aumentar la cobertura a través de la construcción de vías, pero en relación con las máquinas que por ella transitaban, la transformación había sido lenta, limitada solo a lo básico.

A finales de esa misma década, al gobierno mexicano se le ocurrió anunciar que se iba a modernizar el sistema, plan que básicamente consistía en cambiar las locomotoras ya existentes por unas más modernas.

Teniendo la referencia el modelo japonés, los periodistas de aquellos  tiempos no tardaron en relacionar ambos sistemas y menos en aparecer en los titulares todo lo referente al tren bala mexicano. Se anunció así que el nuevo sistema mexicano sería eléctrico y contaría con doble vía para evitar los consabidos atrasos generados por el hecho de que, con una sola, en las estaciones alguno tenía que esperar. Su primer tramo sería entre la ciudad de México y Querétaro y al final llegaría hasta Guadalajara.


Imagen de Google Street 2020. La zona de la Estación en la colonia San Rafael.

 Así, desde inicios de la década de 1970, la apacible ciudad de San Juan del Río vio aparecer al oriente, muy cerca de la antigua vía para entonces ya casi centenaria, al nuevo sistema y efectivamente consistía en dos vías y a sus lados, una línea de postes para el cableado que conduciría la electricidad para alimentar las máquinas.

La expectación en la gente era previsible, pero aumentó cuando  en físico empezaron a conocerse detalles de su construcción como el enorme túnel en Palmillas para pasar debajo de la autopista México – Querétaro y peor aún, cuando se anunció que no pasaría como la anterior, por la pronunciada curva que rodea el cerro del Pedregoso ya que era tal la velocidad que desarrollaba que se descarrilaría.

También muy cacareada, se comenzó a construir una nueva estación, tanto de carga como de pasajeros que por lo amplio de sus instalaciones se dijo, no podría estar en el perímetro de la ciudad y el lugar elegido sería a un costado del mencionado cerro, cerca de la actual colonia San Rafael, que inicialmente era parte de sus instalaciones como casas para los trabajadores ferroviarios.


Imagen de Google Street 2020. La Estación, original, el edificio blanco es reciente.




Imagen de Google Street 2020. Más instalaciones de la estación.

Ante el asombro de la población local, precisamente a partir de la estación nueva, el trazo de las vías dobles avanzó al lado contrario, es decir al sur del municipio lo que aumentó la admiración de muchos ya que ante el obstáculo de tener que atravesar la barranca de San José, se construyó un puente que fue durante muchas décadas la construcción más alta de todo el estado. Según dicen son 70 metros  desde hasta el nivel del río. Tan alto que, aunque está completamente alejado de él, fue visible desde muchas partes del centro de la ciudad, El aumento en la altura en las nuevas construcciones lo fue ocultando de la vista, y ahora solo puede hacerse desde las cercanías de la Central Camionera.


Fotografía personal. El puente en la cañada de San José.

Tras salvar la barranca y pasar junto a la ex hacienda de San Jacinto, otra vez ante el azoro popular, un profundo corte en la ladera del cerro de la Venta le hizo retomar hacia el norte y a partir de ahí, seguir el trayecto a Querétaro, en un trazo más o menos paralelo a las otras dos vías existentes. (México - Ciudad Juárez y México - Laredo)

Como hace tiempo los niños ya no andan de vagos como antaño, muchos habitantes piensan que todas las vías que se ven al oriente y norte de la ciudad son la misma y como dos confluyen en el cerro del pedregoso, pareciera ser así, pero puntualizo que son diferentes:

La tradicional vía, de hace más de un siglo es la que baja por el cerro del Pedregoso y es la que pasa casi en el centro de la ciudad y llega a la vieja estación. De una sola vía, es el Ferrocarril central o México Ciudad Juárez.

En la colonia San Rafael, exactamente en el puente que la une con el Nuevo parque industrial está la doble Vía, una desviación la lleva del ramal principal a la estación nueva.

Desde la población de San Nicolás,  Tequisquiapan, avanza el México Laredo, pasando por la Población de la Llave, tiene un ramal paralelo a la carretera  que a través de San Isidro llega a la estación vieja, es el tercer sistema, todos independientes, se unen solamente en los ramales.

Se prometió que el nuevo tren iniciaría operaciones a inicios de los setentas, (puntualizo que el gobierno nunca lo proclamó como Tren Bala, pero así se le quedó durante muchos años) por diversas razones esa inauguración se fue posponiendo año con año, sin que se supiera  porqué. Las malas lenguas dicen que los nuevos vagones, ahora eléctricos que ocuparía sí se construyeron pero que por un error de diseño no les quedaban a los rieles, es decir, eran de otra medida y  como nunca hubo una aclaración oficial del retraso, aunque no fuera completamente cierto el asunto, en el imaginario popular quedó como cierta la versión.

Una especie de inauguración oficial de la Estación se llevó a cabo el año de 1978 con asistencia del mismísimo presidente de la República, el Lic. José López Portillo y la plana mayor del Gabinete, incluida la secretaria de Turismo, Rosa Luz Alegría, por entonces omnipresente en las giras.

Acudió el conglomerado popular a la nueva estación a la fastuosa ceremonia, presidida por el conglomerado político de los tres órdenes de gobierno, que incluyóde la visita a otros lugares de la ciudad.


Fotografía de la página de Gustavo Nieto Ramírez. La Comitiva en la inauguración de la estación, en la fila de 4 El Senador Rafael Camacho Guzmán, El Presidente de la República, José López Portillo, el Gobernador Calzada y el Presidente Municipal, Gustavo Nieto, detrás de él, Rosa Luz Alegría, secretaria de Turismo, omnipresente en los actos presidenciales. La loma de atrás es la actual zona de autolavados de la colonia San Rafel.

No sé si me equivoque, pero después de la inauguración los trenes que transitaban por él eran los mismos de siempre, no recuerdo haber visto nunca uno que de verdad funcionara con electricidad, cierto que el tiempo de recorrido era más corto, pero eso se debía a su trayecto sin curvas pronunciadas y su paso por las afueras de las poblaciones, no a las máquinas. Algo que sí fue como lo anunciado, fueron los durmientes, que siempre habían sido de madera y ahora eran de concreto. Aunque se decía que los rieles iban a ser de aluminio, solo que en otra sección, aquí nunca vi uno. Dicen que en otros lugares si funcionó el sistema eléctrico, que originalmente estaba diseñado para el también malogrado ferrocarril transitsmico, en Oaxaca.



Imagen tomada de la página de TCM en Youtube, la imagen distintiva del sistema

La estación de carga si funcionó, desde sus inicios, pero igual, con servicio a los mismos vagones antiguos. La contigua de pasajeros nueva, que estaría en el mismo lugar y que de inicio parece que estuvo funcionando, pero siendo ya los años postreros del sistema, se fueron espaciando las corridas de pasajeros hasta que prácticamente desaparecieron.

Imagen tomada de la página de TCM en Youtube, las primeras máquinas efectivamente electricas, notese el sistema superior para tomar la energiía de los postes (catenarias)

 EL SEGUNDO AIRE


Imagen tomada de la página de Andrei Mihaii, el Constitucionalista, no era eléctrico, pero sí funcionó.



Fue hasta el año de 1985 que se implementó de verdad un nuevo sistema de pasajeros con máquinas Diesel algo modernizadas, llamado el Constitucionalista, sí funciono unos años, pero por la misma razón fue  descartado, aunque de nueva cuenta nada tenía que ver con el japonés, también se le conoció como el tren bala y a raíz de un accidente que lo descarriló el 5 de octubre de 1986, poco después terminó su funcionamiento, sobre todo porque ya no había casi pasajeros, a pesar de que había logrado reducir el tiempo de viaje de México a Querétaro de 6 a solo tres horas, incluso el día del accidente la mayoría de pasajeros iban a presenciar el partido entre las cobras de Querétaro y el América. Por el hecho de que también se le conoció como tren bala y el incidente, en forma burlona, se le decía el Tren madre que valió bala...



Fotografía personal, 2007 Los postes(catenarias ) que proporcionarían energía a los trenes eléctricos. Hoy es el puente que une la Colonia México con el Nuevo Parque Industrial.

Este sistema de pasajeros incluía, además del Constitucionalista a Querétaro y San Miguel Allende, el Jarocho, que iba a Veracruz, El Tapatío a Guadalajara, El Regiomontano de Saltillo y Monterrey y el Chepe (CH, P, Chihuahua Pacífico) solo sobrevivió este último, como turístico.

 Ante ello, las instalaciones de la nueva estación, flamantes y solitarias en su inicio, poco a poco se han ido deteriorando y hoy  están rodeadas por  zonas habitacionales. Algunos compuestos propios del sistema que iba a ser eléctrico por no ser usados han sido abandonados por completo.

En la actualidad, mucho del cableado original fue desinstalado y otro mercancía para el pillaje, del que ha sido objeto precisamente por su tendido en lugares alejados, incluso hace unos cinco años se dio el caso de que la policía detuvo a alguien mientras intentaba con un soplete, cortar una sección de riel. El grafito como hongo, se ha extendido a las instalaciones, puentes, postes y todo lo que tenga superficie. En el altísimo puente sobre el río, está el inverosímil caso de que han podido acceder a los postes sobre él para rayarlos, no sé si de ahí también robaron cable, todo es posible.



Fotografía personal 2007. Grafitos en la base de la catenaria, con 70 metros de vacío debajo.

Todos los proyectos mencionados fueron a dar al traste con la privatización de los ferrocarriles en 1996, acabando todos a nivel nacional y la terminación de los proyectos eléctricos  al menos de largo alcance incluso las pocas maquinas eléctricas que funcionaban aún (algunas se deshicieron incluso sin rodar ni un kilómetro) se vendieron al extranjero, al parecer eran incosteables en el país.

El completamente balín

Dicen que la justicia es ciega, pero la política debe ser amnésica. En el sexenio pasado, como uno de sus grandes proyectos, se anunció la creación de un nuevo sistema de pasajeros. Con el congestionamiento de la autopista México Querétaro, la opción de un tren de pasajeros que hiciera la ruta entre las dos ciudades en apenas dos horas era alentador.

Quizá ara evitar las comparaciones con los anteriores, ahora sí desde un inicio, este se anunció como TREN DE ALTA VELOCIDAD  o más sencillamente el TAV, por sus iniciales y su construcción estaría a cargo de un consorcio chino.


Fotografía tomada de Youtube,  Proyecto del tren de alta velocidad, casi bala del sexenio de Peña Nieto
.

Ante ese anuncio, en 2014, aunque no se había movido todavía ni un solo riel, pero del que se sabía que requería de un nuevo tendido de vía y por lo mismo de nuevas estaciones, en la ciudad de Querétaro, incluso hubo movimientos populares para no dejar que en determinadas colonias se instalara la estación, por un montón de inconvenientes que se mencionaron.



Esquemas tomados de la página de Gustavo Nieto, en la esperanza de que hubiera Estación en San Juan.

Por otro lado, en San Juan, en donde se insinuó que no iba a haber estación o escala, el clamor en algunos sectores era que se instalara.

Uno de los iniciales escándalos de corrupción de ese sexenio le dio fin al principio del proyecto dejándolo ahora si en completamente balín incluso para que el escándalo no trascendiera se aceptó rescindir la concesión, previa indemnización a los chinos.

Por tener casi la misma edad que el proyecto casi desde sus inicios, consigno a ustedes, la percepción a nivel local, sé que los datos oficiales dirán algunas cosas diferentes, pero así se vio desde aquí.________________________________________________________________

EL CHICHIMECA AL SERVICIO DE LA COMUNIDAD

________________________________________________________________

Uno de los lemas de este blog, que se puede leer a la izquierda del encabezado originalmente decía:


San Juan del Río 

Capital del mundo

Ombligo del Universo

y próximo puerto de mar.


En aquellos años lo tuve que cambiar, ante la idea de que hubiera estación en San Juan


San Juan del Río 

Capital del mundo

Ombligo del Universo

y próximo puerto del T.A.V.  (Tren de alta Velocidad)